I+D GCC

Su ubicación, frente a un área pública con gran potencial dentro de la planta, lo convierte en un punto estratégico y representativo. La propuesta de diseño parte de premisas sencillas pero contundentes: Organizar de manera clara y legible las funciones del edificio, generando un ambiente comprensible para todos los usuarios. Dividir el programa arquitectónico en células funcionales, reorganizadas en actividades compatibles que optimicen la operación y los procesos productivos.

Colocar al frente los espacios de contacto con visitantes, como una carta de bienvenida y flexibilidad de uso. Resguardar en la parte posterior los laboratorios y la planta piloto, asegurando eficiencia y cuidado de la imagen. Ubicar las oficinas en un segundo nivel, separadas de las áreas técnicas, para dar privacidad y comodidad. El corazón del edificio será un espacio central de integración, un lugar donde confluyen las diferentes áreas y que, más allá de su función operativa, dará identidad y sentido de comunidad.


El diseño modular permitirá crecer en el futuro, mientras que la integración con áreas verdes, la entrada de luz natural y la respuesta al clima local refuerzan su carácter sostenible y humano.